domingo, 2 de noviembre de 2008

Biología Británica

Llevo dos meses aquí y ya estoy llegando a alguna conclusión en mi trabajo de campo como naturalista (algunos me llamarán cotilla) de las costumbres británicas. Pero hoy quiero centrarme en las adaptaciones genéticas que han adoptado los Británicos para vivir en un ambiente hostil como es una isla (La Isla) y que se ven favorecidos gracias a su endemismo.

El primero de ellos es el atermismo o cualidad para no tener frío, lo que, unido a su vocación innata hacia la espantajería y la mamarrachez al vestir, provoca resultados, al menos, llamativos. Se ve a la gente con tres abrigos y pantalón corto o en chanclas, por ejemplo. Pero, el otro día pude observar gracias a qué mutaciones y adaptaciones biológicas lo consiguen. Estaba en un curso de paleogenética de la India (bueno, cosas peores habréis hecho vosotros). Allí estaba un fulano, que luego me dijeron que era un gurú de la genética, y la pinta la tenía: pelito largo liso por debajo de los hombros, jersey fino de lana, pantalón negro, cara de cristo medieval con ojeras y con pinta de no haber visto la luz del sol en varios lustros y, con la que estaba cayendo, CHANCLETAS. Pero chancletas de playita, de esa que llevan los arqueologos franceses a los congresos (también, como aquellos, en un momento dado se sacó las pelotillas de entre los dedicos).
Bueno, pues como el gurú estaba dos sitios delante de mi pude ver porque pueden ir con chanclas a menos de cinco grados. La razón: unas durezas en los talones y dedacos del grosor de la puerta de la caja fuerte del banco de España.

La otra es lo sensible que tienen los ingleses el ph de su piel. Sí, realmente hay parte de la población que lo debe de tener muy sensible y frágil. Esta es la única razón que encuentro, de manera sensata, de que los ingleses no se laven. Deben de tener el mismo problema que los perros. Si los lavas mucho se les estropea el ph. Los británicos (algunos) deben de tener un problema similar.

En fin, hay mas cosas, pero por hoy ya ha sido suficiente como para que me deporten.